Mtra. Leticia Dávalos II
(Segunda parte)
Por Saraí Rangel

Mtra. Leticia Dávalos IIDespués de su preparación profesional en Querétaro y otros lugares, Leticia regresa a Morelia para realizar su sueño.

¿Cómo fue regresar a Morelia, después de que toda su formación fue fuera de la ciudad?
“Nadie es profeta en su tierra, así que fue muy difícil (…) entrar y que digan <<ý¿cómo? Si ella era de aquí, ella que va a sabe>>r; además ya había otros maestros que tenían sus talleres, la maestra Anita que se retiró cuando sus hijas crecieron y muchas niñas se fueron a otras escuelas”.

En 1992 abre sus puertas Pro Ballet
“Hace 16 años empezamos en este lugar, con mucho trabajo; al principio tenía sólo una alumna y primero me prestaron un saloncito frente al hospital civil, luego me prestaron otro frente a las Tarascas, ahí tenía tres alumnas, no tuve mucho éxito. Después se desocupo este dónde estamos y me lo rentaron, en ese entonces tenía sólo dos alumnas y mi preocupación era ¿cómo iba a pagar la renta?”

A pesar de que el inicio como maestra de Ballet en la ciudad que la vio bailar por primera vez fue difícil la Leticia cada vez que entraba a su salón pensaba: “Ojala un día vea la barra llena de alumnos”.
Se podría decir que lo logró, hoy en día Pro Ballet es una escuela de danza clásica muy importante y prestigiosa. “Somos muy comprometidos con lo que hacemos, queremos darles todo lo que nosotros no tuvimos a tiempo”. De aquí ha salido gente muy talentosa y reconocido, como Abdiel Villaseñor, Irlanda Sotelo que obtuvo el 4° lugar en el concurso nacional de ballet, Fernando Luna que está bailando en una compañía en Alemania y Rocio Luna que da clases en la Universidad Michoacana.

A pesar de que es una escuela de calidad dirigida por una excelente y preparada profesora hay muchos talentos que no salen porque tienen la idea de que el baile es sólo un hobbie y no quieren dedicarse profesionalmente y de esto nos platica también la maestra Leticia:
“He tenido alumnos talentosísimos que tienen todo para irse y hacer una carrera en alguna compañía en otro país pero se asustan, sobre todo las mujeres, y sus papás no las dejan. Han pasado niñas muy talentosas pero que también son muy talentosas en la carrera que escogieron”.

Imagino que también debe ser difícil el tener que sacrificar ciertas al dedicarse al ballet sobre todo económicamente. “Te vas a morir de hambre, económicamente mal pagado, pero la satisfacción que llevas a dentro no te la da ningún dinero”.

La labor de Leticia Dávalos no para simplemente en la enseñanza de ballet, es Ex presidenta de la Sociedad Mexicana de Maestros de Danza que trata de aglutinar a todos los maestros sobre todo a los de ballet. “Tenemos injerencia con todas las escuelas, de las profesionales las más importantes: el Centro Nacional de las Artes, la Academia Mexicana de la Danza, La Escuela de Monterrey, y con todas las academias de México de las cuales muchas pertenecen a la asociación; nosotros cada dos años realizamos el Concurso Nacional de Ballet y de ahí han salido talentos que ahora están bailando en las mejores compañías del mundo. La última que acaban de contratar es Samara Thomson de Cancún, que está en el American Ballet Theatre”.

Como ya lo habíamos comentado La Imperial Society of Teachers of Dancing es por la que están regidos en Pro Ballet y quien los certifica por eso cada año viene desde Inglaterra a examinar tanto a profesores como a los alumnos. El trabajo de esta academia es conocido en otros países como Cuba y Canadá.

La maestra Dávalos pertenece al Consejo de la Ciudad, en el área de Ciudades Hermanas, fue consejera en la Secretaría de Cultura en la administración pasada y es considerada líder de opinión en temas culturales por lo que la buscan mucho para asesorar en el tema.


“Fui consejera de la Secretaría de Cultura en el período anterior, pero renuncié, es un cargo honorifico muy padre, pero te limita mucho como hacedora de arte; porque entonces no podía accesar a los programas como a los de proyectos de coinversión, ya que estaba dentro del comité”.

¿Qué satisfacciones le ha dejado su trabajo como maestra de Ballet?
“Muchísimas, ver el progreso desde las chiquitas que llegan como yo les digo salvajes de la calle y ver la disciplina, la entrega, que te entiendan, que bailen, que tengan ese gusto y que aprendan no nada más el paso; tratamos de darles toda la calidez que es el arte, de corazón a corazón”.

El mundo de las artes y en este caso el de la danza clásica es un mundo de magia donde tanto Lety como sus alumnos se refugian donde como ella misma dice: “se te olvidan todas las broncas que hay”, siempre tratando de que lo que pasa en el mundo exterior no intervenga con el desempeño al bailar que sienta que ese momento es suyo, “De ti con tu alma”.

Las recompensas: “Les estamos dando lo que les estamos prometiendo. (…) Me encanta mi trabajo, no extraño para nada bailar, baile lo que tenía que bailar, que lástima que no empecé en un buen lugar, pero me toco por algo aquí, a lo mejor esta labor de maestra no hubiese sido lo mismo si hubiese bailado.”

Nuevos sueños: “Yo quisiera que de aquí saliera más gente profesional, no me interesa de que rama de la danza; tenemos a Valeria Vega que baila tango preciosísimo, me gustaría hacer más pero el factor económico pesa”.

Para el ballet se requiere tener mucha disciplina y mucha dedicación, sobre todo mucha pasión y esto es precisamente con lo que cuenta la Maestra Leticia quien se declara enamorada de su trabajo. “Estoy enamorada de la vida, del amor y el arte, he tenido de todo, de todos los sufrimientos y todas las alegrías que te puedas imaginar pero soy del tipo de los del vaso medio lleno”.